Entre las medidas indicadas para el tratamiento de esta condición, se incluyen:
- Restricción del consumo de sal.
- Suspensión o evitación del consumo de cigarrillo y alcohol.
- Reposo en cama cuando se presentan los episodios.
Puede ser necesario el uso de medicamentos para el control del vértigo, terapia psicológica y otras intervenciones de mayor complejidad, las cuales son de responsabilidad médica.
En todos los casos, el tratamiento debe ser prescrito por el médico tratante, previo análisis conjunto de la naturaleza y el grado de evolución del cuadro y de los efectos, los beneficios y los riesgos de las terapias disponibles.