Flatulencia

Es la expulsión de gases a través de la última porción del tracto digestivo, el ano, los cuales suelen tener un olor desagradable, debido a ciertos componentes del gas, y a veces se acompaña de un sonido característico. Los gases pueden ser ingeridos (por ejemplo, oxigeno del aire) o producidos como resultado de la actividad de las bacterias y las levaduras intestinales, que al descomponer los alimentos liberan metano, sulfuro de hidrógeno, disulfuro de carbono y dióxido de carbono.

Causas

En general, durante la digestión de los alimentos se producen pequeñas cantidades de gases, pero ciertos alimentos o comidas tienen componentes poco digeribles que al ser degradados por las bacterias del intestino generan una mayor cantidad de gas, por ejemplo ciertas legumbres, tubérculos o granos (como la habichuela, el repollo, el brócoli, el tomate, los fríjoles, las alcachofas, las papas); de igual manera, las comidas ricas en grasas o en fibra soluble (salvado de avena) o la leche y sus derivados, en las personas con intolerancia a la lactosa. En ocasiones las flatulencias pueden ser un síntoma de diversas enfermedades que se acompañan de una inadecuada digestión de los alimentos, entre ellas:

• La mala absorción intestinal.
• Las infecciones gastrointestinales, como la gastroenteritis.
• La insuficiencia hepática, porque el hígado deja de producir o produce menos cantidades de ácidos biliares necesarios para la digestión.
• Las enfermedades del páncreas, como la pancreatitis, ya que el páncreas secreta enzimas digestivas.
• El síndrome de intestino irritable, porque en este trastorno está alterada la motilidad normal del intestino (aumentada o disminuida), lo que favorece la descomposición de alimentos no digeridos por parte de las bacterias.
• El estreñimiento, ya que la lentitud del tránsito intestinal favorece la acumulación de gases.

Síntomas asociados

Con frecuencia, la flatulencia se acompaña de otras manifestaciones debidas a la acumulación excesiva de gases en el intestino, como distensión abdominal, malestar o dolor en el abdomen, eructos y aumento de los ruidos intestinales.

Tratamiento

Además de modificaciones en la dieta, dirigidas a eliminar los alimentos que provocan gases (o la leche y sus derivados en las personas con intolerancia a la lactosa, por ejemplo), están disponibles varios medicamentos que ayudan a eliminar el exceso de gas en el intestino, entre ellos la simeticona, el subsalicilato de bismuto, metoclopramida y el carbón activado.Además cuando la flatulencia es ocasionada por trastornos de la flora intestinal normal, se recomienda tomar probióticos (de múltiples especies) por vía oral.
Si la flatulencia es debida a una infección intestinal (gastroenteritis), a veces es necesaria la administración de antibióticos orales, como metronidazol, norfloxacina, ciprofloxacina, ampicilina o trimetoprim-sulfametoxazol.

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