Desgaste ocupacional: Una nueva enfermedad

Aunque hace muchos años se reconocen los efectos del estrés crónico en la salud física y mental de quienes se desempeñan en cargos que tienen un alto nivel de contacto con el público y una implicación personal muy fuerte, fenómeno conocido como síndrome de burnout o síndrome del “quemado”, solo hasta este año, fue incluido por la Organización Mundial de la Salud, en la clasificación internacional de las enfermedades.

También denominado “síndrome de desgaste ocupacional”, el burnout es definido por esta organización como una condición de estrés crónico resultante de la exposición a estrés crónico en el lugar de trabajo, aclarándose que “se refiere específicamente a los fenómenos que se presentan en el contexto laboral y no debe aplicarse para describir experiencias en otras áreas de la vida”.

Cuando una persona presenta esta patología, puede sentirse agotada de forma permanente, experimentar desmotivación e insatisfacción con el trabajo y asumir una actitud de indiferencia en sus relaciones personales y en su desempeño ocupacional, observándose la aparición ocasional de síntomas físicos como dolor de cabeza, náuseas y dificultad para dormir, entre otros.

El reconocimiento del Síndrome de Burnout como una enfermedad por parte de la Organización Mundial de la Salud es un avance muy importante para despertar la consciencia de quienes están en riesgo y para fomentar la toma de medidas de prevención a nivel personal y empresarial, minimizando así la probabilidad de complicaciones físicas, mentales, sociales y laborales.