Qué puede afectar tu vida sexual

La actividad sexual es un aspecto importante de la vida de todos los individuos y diversas condiciones pueden alterar el desempeño sexual, desde diferentes enfermedades (entre ellas la diabetes, la hipertensión arterial y la aterosclerosis) hasta circunstancias emocionales, como el estrés.
Al respecto, las preocupaciones, la falta de sueño o de un descanso apropiado, el consumo excesivo de bebidas alcohólicas y el cansancio físico, en ocasiones, pueden  afectar el desempeño sexual sin que ello signifique que existe algún problema o enfermedad.

Por otra parte, en los hombres, la disfunción eréctil, que consiste en la incapacidad de alcanzar o mantener una erección suficiente para tener una relación sexual satisfactoria, es un problema bastante común. Se estima que alrededor de 10% a 20% de los hombres sufren de disfunción eréctil, esporádica o frecuente y si bien en el primer caso, casi nunca se trata de una enfermedad sino de una situación transitoria (casi siempre debida a que las circunstancias del encuentro sexual no son las más adecuadas), en el segundo, el problema se presenta durante la mayoría de las relaciones sexuales, por lo menos durante tres meses consecutivos y, requiere de tratamiento médico.

De igual manera, hasta 45% de los varones han presentado eyaculación precoz en algún momento de la vida. Es importante establecer la diferencia entre los episodios esporádicos de eyaculación precoz, que pueden deberse entre otros factores ya sea al efecto de ciertas sustancias (alcohol, algunas drogas ilícitas) o a las condiciones del encuentro sexual, de la eyaculación precoz patológica es decir aquella que ocurre la mayoría o todas las veces y su causa más frecuente es un problema psicológico. 

Como en la actualidad existen diversas estrategias para combatir tanto la disfunción eréctil como la eyaculación precoz y otros problemas del desempeño sexual, es importante consultar al médico para recibir el tratamiento más apropiado para cada persona, que puede incluir medicamentos (como sildenafil), antidepresivos tricíclicos, inhibidores selectivos de serotonina (sertralina, paroxetina, fluoxetina), o técnicas de psicoterapia y modificación de las conductas durante el sexo.

Véase también:

• Disfunción Eréctil
• Vida sexual activa
• Cómo sobrevivir una infidelidad
• Cómo mantener la relación con su pareja
• Depresión en hombres
• Infertilidad masculina