Polidipsia o sed permanente

Es la sensación persistente de sed, que obliga a las personas a tomar agua o cualquier otro líquido de una manera casi constante.

Causas

Aunque diversas condiciones pueden provocar polidipsia, las causas más frecuentes son la diabetes (tipo 1 o tipo 2) y la denominada diabetes insípida .
La diabetes insípida es un trastorno provocado por la incapacidad de los riñones para responder de manera adecuada a la acción de la hormona antidiurética (producida por una glándula ubicada en el cerebro, llamada hipófisis). Como esta hormona hace que los riñones absorban agua, el defecto de su función se traduce en una pérdida excesiva de agua en la orina y entonces aparece la polidipsia como una manera del organismo de recuperar el agua perdida.

En ocasiones, la polidipsia puede deberse a otras causas, como el tratamiento con diuréticos, la deshidratación, el envenenamiento por atropina, trastornos psicológicos (polidipsia psicógena), la hemorragia severa y el uso de laxantes fuertes, que provocan diarrea severa, con la subsiguiente pérdida de grandes cantidades de agua en las deposiciones.

Manejo

No hay un tratamiento específico de la polidipsia y, por lo general, este síntoma desaparece o disminuye de manera significativa al tratar la enfermedad que la ocasiona. En el caso de la diabetes insípida, el tratamiento depende de la causa y las opciones comprenden cirugía y medicamentos como la vasopresina o antiinflamatorios (indometacina).

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